4.9.10

Elige la vida: la elección costosa

5 de septiembre de 2010
Domingo 23º de Tiempo Ordinario. Año C.

Dios nos llama a cada uno de nosotros a salir del armario como pueblo de Dios fiel y valedor de la vida, sin importar el coste.

Cualquiera que haya salido del armario sabe lo costoso que puede ser. Amigos y familia pueden preguntar: "¿Cómo puedes hacernos esto? ¿Cómo puedes ser tan egoísta? ¿Cómo puedes volverle la espalda a la vida que habíamos esperado?"

Las personas que se manifestaron como seguidores de Jesús con frecuencia obtuvieron la misma reacción. Fueron acusados de menospreciar, incluso de odiar a su familia y amigos. Jesús parece confirmar las peores sospechas de cada uno: "Si alguno viene a mí y no aborrece a su padre, madre, mujer, hijos, hermanos, hermanas y hasta su propia vida, no puede ser mi discípulo." (Lucas 14: 26). Sospechamos que éste es un caso de hipérbole, de exageración para captar la atención. Pero hipérbole o no, esto no rebaja la dura realidad de que si queremos ser sinceros con la vida que estamos llamados a tener, si queremos elegir la vida (Deuteronomio 30: 19), es probable que gente que no pueda conllevar esto, incluso aquellos que amamos, nos llamen odiosos. Salir del armario es costoso. Es ir a contra pelo, y no deberíamos estar sorprendidos por el grado de resistencia que encontramos.

¿Cuál es el precio que has tenido que pagar para ser honesto sobre quién eres y sobre quién estar llamado ser?

Puede que después de leer Jeremías 18: 1-11, nos preguntemos si algo de la resistencia que encontramos vendrá de parte de Dios, cuando nos atrevamos a elegir la única vida que sabemos cómo elegir. Vemos un Dios cuyas promesas parecen condicionales. Lo que sea que Dios pueda habernos prometido, puede ser retirado si a Dios no le gusta nuestra repuesta (versos 9-10). Oímos los ecos de la búsqueda de culpabilidad por el 11-S o por el huracán Katrina en los nuevos valores familiares. Pero la metáfora que rige aquí, señala Charles Allen, es la de un alfarero que no se da por vencido cuando la arcilla no mantiene su forma. En lugar de desecharla, el alfarero intenta una nueva forma según le parece mejor hacerla (versos 3-4). Así es como Jeremías llega a ver la mano de Dios íntimamente involucrada en los acontecimientos de su día. Incluso aunque Jeremías usa la metáfora del alfarero para advertir de que Dios está "disponiendo el mal" contra su pueblo (verso 11), la metáfora original nos cuenta que Dios está aún manos a la obra, incluso en estos acontecimientos desastrosos, hallando una nueva forma para su pueblo según le parece mejor hacerla.

Los fragmentos del Salmo 139 se hacen eco, en este sentido, de la implicación íntima e ineludible de Dios en el modelado de cada una de nuestras vidas, con quizá alguna ambivalencia por parte del salmista. Marti Steusssy también detecta huellas de una reclamación de inocencia, acaso contra acusaciones de blasfemia: "Dios, me conoces". En cualquier caso, cada uno de nosotros ha sido hecho de forma formidable y maravillosa (verso 14). Helene Russell cree que tanto la metáfora del alfarero como el salmista, nos transmiten que Dios ha fundido su suerte tan íntimamente con nosotros que nuestro ser afecta al ser de Dios.

¿Cómo podría Dios estar modelando tu vida? Si no resultas ser como "se espera", ¿puedes percibir la bondad en la forma que tu vida toma en realidad?

Como Jeremías, Deuteronomio 30: 15-20 y el Salmo 1 advierten de consecuencias nefastas si no seguimos las leyes de Dios. De nuevo, aquellos de nosotros que practicamos valores familiares alternativos hemos oído pasajes como estos citados contra nosotros más veces de las que podemos recordar. Pero Charles Allen responde que, si aceptamos el último consenso rabínico y cristiano de que uno que ama a otro ha cumplido la ley entera (Romanos 13: 8), entonces podemos deleitarnos en la ley y podemos estar de acuerdo en que amar a otro es elegir la vida, y que no amar en absoluto es elegir la muerte.

Marti Steussy observa que este capítulo del Deuteronomio probablemente fue añadido al cuerpo principal del libro, después de la caída de Jerusalén y es en realidad un llamamiento a un nuevo comienzo por parte del pueblo de Dios. Helene Russell entiende "elegir la vida" como una elección sobre nuestras verdaderas identidades, sobre si nosotros y nuestros descendientes nos convertiremos, nosotros mismos, en una bendición o una maldición para los demás, o entre nosotros.

¿Cómo puede la vida que tú eliges convertirse en una bendición, no sólo para ti sino para los que están a tu alrededor? ¿Están tus elecciones modeladas por lo que tu vida te está diciendo acerca de tu amor por otro?

Filemón 1-21 es una carta, cuando menos, controvertida. Desde los tiempos de Crisóstomo, en el siglo IV, ha sido citada en defensa de la institución de la esclavitud, pero ni Helene Russell, Marti Steussy ni Charles Allen encuentran ningún respaldo a la esclavitud en absoluto. Algunos estudiosos actuales se preguntan, para empezar, si Onésimo fue alguna vez un esclavo. La carta no dice que perteneciese a Filemón, y la petición de Pablo de que Filemón reciba de nuevo a Onésimo "no ya como esclavo, sino como más que esclavo" (verso 6) es ambiguo. "Como" podría indicar una condición virtual, no una real, y el mismo verso parece indicar que Onésimo y Filemón son hermanos no sólo espirituales sino también "en la carne". (Ver la introducción y comentario de Allen Callahan en The New Interpreter's Study Bible, Nashville: Abingdon Press, 2003, pp. 2147-2150).

En cualquier caso, incluso si Onésimo era un esclavo (como la mayoría de los comentarios aún concluyen), Pablo lo considera "no ya como esclavo, sino como más que esclavo" (verso 16), y no se está refiriendo sólo a su estatus espiritual sino también a su estatus físico. Es igualmente digna de mención la decisión de Pablo de apelar al amor, a la persuasión, antes que a la afirmación de su autoridad. El tono de Pablo es íntimo, refleja una visión de una familia alternativa y una estructura social alternativa a las normas imperantes, y está llamando a Filemón a manifestarse como uno de esos miembros de una familia alternativa.

¿Qué te impulsa a seguir escuchando la Biblia tanto como para leer "Out in Scripture"? ¿Es un sentido de deber, o es el amor y el convencimiento, o es un poco de todo lo anterior?

Oración inclusiva

Dios misericordioso,
tú nos sales al encuentro,
tú nos sostienes y nos desafías en nuestra vida junto a otros;
transforma nuestras relaciones,
para que el amor mutuo continúe
hasta que seamos recibidos en el alto puesto
que has reservado para todas tus hijas e hijos,
por tu Palabra y tu Espíritu.
Amén.