1.5.10

Pascua es comunidad


Domingo 5º de Pascua. Año C.
El regalo de nueva vida que Dios nos hace en la Pascua, no solo anuncia que Dios nos acepta, sino también nuestra aceptación mutua, a pesar de nuestras diferencias.
 Hoy conversan Tat-Siong Benny Liew, Angela Bauer-Levesque y Alma Crawford.
Los pasajes para este domingo sugieren que la Pascua trata de la creación de la comunidad. En contraste con el arrobamiento teológico conservador en el que los justos se elevan al cielo, Apocalipsis 21:1-6 describe la nueva Jerusalén descendiendo a la tierra desde el cielo. Esta dirección afirma nuestro mundo y a nosotros como seres humanos. Esto es especialmente poderoso ya que el pasaje anuncia más adelante que Dios habita entre los mortales. Dada la siguiente declaración contra la muerte y la afirmación de que Dios hace nuevas todas las cosas, uno puede decir que la nueva vida que Dios da en la Pascua está orientada hacia una nueva comunidad en la tierra. Esta nueva comunidad asume la asombrosa aceptación de Dios y su deseo de habitar en medio de la humanidad.
Como el Salmo 148 enfatiza repetidamente, la comunidad de Dios incluye a "todos". Esta nueva comunidad incluye no sólo a la creación más allá de la humanidad, sino a los seres humanos que son diferentes en términos de rango, raza, etnia, género y edad. Podríamos añadir a esto la orientación sexual, ya que Hechos 11:1-18 repite el hecho fundamental en el cual las personas que habían sido vistas por largo tiempo como "impuros" se descubren como aceptados por Dios. Esta inclusión de otras identidades, como la orientación sexual, además de la raza y la etnia, está también justificada por la manera en que el propio libro de Hechos evoluciona de forma fluida desde la circuncisión y la comida con gentiles a las leyes dietéticas y las comidas de alimentos no "kosher". De esta manera, Juan 13: 31-35 muestra el "amaos los unos a los otros" como el "nuevo mandamiento" para la nueva comunidad de Jesús.
¿Cuánto tiempo piensas que llevará que las personas LGTB sean aceptadas por los demás en las comunidades de fe después de que Dios las haya aceptado? ¿Qué conllevará?
El libro de Hechos demuestra que lleva un largo tiempo, para la comunidad de los primeros seguidores de Jesús, aceptar a los gentiles, a quienes habían etiquetado a la vez como "profanos" y como "impuros". Hechos 11:1-18 contiene la narración de Pedro de su experiencia en Hechos 10, donde Pedro aprende la dura pero importante lección de no llamar "impuro" a ningún ser humano. Es una dura lección para Pedro ya que Dios tiene que repetir el milagro y el mensaje a Pedro hasta tres veces, para que entre en la dura mollera de Pedro. En ambos pasajes, en los que se narra la experiencia de Pedro, se nos dice que Pedro no sólo sale con un argumento para desafiar a la voz divina, sino también con una justificación de su resistencia como una cuestión de seguimiento de una tradición antigua (Hechos 10:14; 11:8). Así como Pedro se ha resistido a la voz divina repetidamente, el mismo Pedro necesitará recontar su historia varias veces, antes de que los demás estén dispuestos a aceptar a aquellos a los que se les ha enseñado a menospreciar y a temer. Sumándose a Hechos 11:1-18, Pedro alude a su experiencia con el pagano Cornelio y su unidad familiar otra vez en Hechos 15:6-8. Todas estas repeticiones de Pedro muestran cómo desechar tradiciones y suposiciones sostenidas por largo tiempo, es un largo proceso para la mayoría de la gente.
Otra manera de resaltar la paciencia y persistencia necesarias para cambiar a las personas y a las instituciones, es pensar la cobertura que Hechos dedica no sólo al episodio particular de Pedro y Cornelio, sino también a incluir a los gentiles en general. Anteriormente en Hechos 8:26-38, vemos la aceptación de Dios de un eunuco etíope por medio de Felipe, que también acaba por instalar su hogar en la misma ciudad donde vive Cornelio (Hechos 8:40; 10:1; 21:8). En otras palabras, le lleva a Hechos siete capítulos que la comunidad de los primeros seguidores de Jesús, sea capaz de resolver la cuestión de la aceptación de los gentiles, en Hechos 15:1-35. A lo largo de esos siete capítulos, encontramos numerosas personas entrando en debates paciente y persistentemente; puede que incluso afrontando amenazas y actos de violencia.
Quizá sea por eso que también encontramos aún otra descripción una nueva comunidad en Apocalipsis 21:1-6. En un sentido, esa nueva comunidad de aceptación que las personas LGTB anhelan está tristemente siempre allí en el futuro. Al mismo tiempo, Apocalipsis 21:1-6 revela el futuro escondido o la promesa de que esta visión de una nueva comunidad se hará realidad un día. Hemos mencionado hace un par de semanas que debemos mantenernos trabajando con Dios para que los cambios tengan lugar. Al mantenernos trabajando y orando "Ven, Señor Jesús" (Apocalipsis 21:20) para acelerar el cumplimiento de nuestra visión futura, podemos también necesitar los lamentos del salmista, "¿Hasta cuando, Señor, hasta cuando?" (Salmo 6:3), que nos ayuden a perseverar hasta el final.
¿Qué trabajo necesitan hacer las personas LGTB y sus amigos ya que Dios crea esta nueva comunidad?
El Salmo 148 nos ayuda a recordar que nuestra visión de la comunidad puede ser simplemente demasiado estrecha o demasiado parcial. Es fácil, por ejemplo, limitar la comunidad a la humanidad e ignorar el resto de la maravillosa creación de Dios. Esto es, en un sentido, el lado sombrío de Hechos 11:1-18, cuando se le dice a Pedro que mate y coma bestias, reptiles y pájaros, en su creación de una nueva comunidad que ha de ser hecha de judíos y gentiles. Uno puede ir más allá y plantear la difícil cuestión de si la nueva comunidad de Hechos acaba por borrar las señales étnicas centrales del pueblo hebreo. Igualmente, muchos estudiosos del evangelio de Juan han sugerido que la nueva ética del amor, de Juan 13: 31-35, está presente y es entendida por Juan como limitada únicamente a los que forman parte de su comunidad.
¿De qué formas pueden estar las personas LGTB cayendo en la trampa de tener la visión de una "nueva" comunidad basada en una única dimensión (como la inclusión de sólo su propia comunidad particular)?
Esta es una importante cuestión para sopesar, ya que las personas LGTB son también diversas en términos de otros factores de identidad, como -por señalar sólo unos ejemplos- la raza, la etnia y la clase. Puede ser también importante y útil para nosotros recordar cómo las personas transexuales han luchado para ser plenamente aceptadas incluso entre quienes son lesbianas, gays o bisexuales.
¿Cuáles son las notas distintivas de esta nueva comunidad cuya visión Dios está llamando hoy  a las personas LGTB a tener?
 ORACIÓN INCLUSIVA
No hemos elegido ser creados a tu imagen, Dios.

Y no hemos elegido estar en relación con el resto de tu creación,
en la que tantas cosas se nos muestran con una asombrosa falta de semejanza.
Y sin embargo, somos parte unos de otros.
A pesar de todas estas cosas,
reales o imaginarias,
comprendidas o negadas,
reconocidas o ignoradas,
que intentan apartarnos a unos de otros,
ayúdanos a reconocer y a celebrar nuestro mutuo parentesco
y nuestro parentesco común contigo, nuestra Fuente.
Amén.
Versión original en inglés: Out in Scripture.