29 de mayo de 2011
Domingo 6º de Pascua. Año A.Hechos 17:22-31
Salmo 66:8-20
1 Pedro 3:13-22
Juan 14:15-21
Dios no solo crea la humanidad a imagen y semejanza suya, sino que continúa cuidando de nosotros a lo largo de todas las etapas de la vida.
En Hechos 17:22-31, Pablo está en Atenas compartiendo la buena noticia con intelectuales y filósofos en la plaza del mercado -un lugar donde podrían encontrarse personas LGBT. Él les dice que la divinidad sin nombre en la que creen es el creador de toda vida y está al alcance de la mano.
Creados a imagen de Dios los humanos somos hijos de Dios que llegan a conocer su semejanza divina a través de experiencias vividas. Dios está tan cerca como el aliento y la misma animación de nuestros cuerpos. Esta realidad hace a todos los cuerpos santos. Por lo tanto, afirmamos con audacia que las personas LGBT están creadas por Dios, santas y a imagen de Dios, imago Dei.
Pablo apela a lo que sus oyentes saben por experiencia. Esto es importante para las personas LGBT que luchan con interpretaciones de la Escritura y tradiciones religiosas que condenan la homosexualidad. La experiencia de Dios de las personas LGBT es válida. Uno no necesita elegir entre homosexualidad y espiritualidad.
¿A quién y a dónde podría estar Dios llamándote a compartir que la comunidad LGBT está creada por Dios -que son santos y la imago Dei, imagen de Dios?
En el Salmo 66:8-20, el salmista comprende que tanto la prueba como la liberación vienen de Dios. Se anima a las personas LGBT a compartir sus experiencias de lo santo.
A veces, las personas LGBT y otros sienten que Dios es el responsable de nuestras cargas. Si Dios no es el responsable, entonces ciertamente Dios permite que la gente coloque pesadas cargas sobre nosotros. No obstante, quienes luchan encuentran una capacidad asombrosa para dar culto a Dios. Este es el don que las comunidades más oprimidas traen a la iglesia: la capacidad de adorar encarando el temor, tropezando en las pruebas. Este salmo asegura que Dios oye las oraciones en tales circunstancias y no oculta su amor.
El valiente deseo de tantas personas LGBT de ser parte de la iglesia, su buena disposición a identificarse con las personas que las difaman y las rechazan, y de hacer esto por Dios, es el comentario más poderoso a este fragmento al Salmo 66.
En medio de tiempos difíciles, pruebas y opresión, ¿qué puedes afirmar sobre Dios? ¿Qué puedes declarar sobre Dios a quienes son "enemigos"?
En 1 Pedro 3:13-22, la comunidad de Pedro estaba sufriendo una intensa persecución por dar testimonio del evangelio. ¿Cómo alentamos a las personas a encarar la persecución y considerarlo una bendición, especialmente cuando adolescentes son asesinados por "salir del armario" para sus amigos? La virulencia de la violencia contra las comunidades LGBT no puede entenderse. Los miembros de la comunidad LGBT y sus simpatizantes deben luchar por mantener su conciencia libre de represalias, cuando están siendo calumniados, difamados y heridos, literal y figuradamente. ¿El sufrimiento redime?
La promesa de este pasaje es que Dios nos sella en el bautismo y salva a cada uno de nosotros por la resurrección de Jesucristo. Por otra parte, este texto en una mina anti-persona para los vulnerables. Con frecuencia hemos sido acusados de "injustos", y el acusador afirma "pero Dios te ama de todos modos". Esta es una forma de la teología "ama al pecador y odia al pecado" que la gente ha usado efectivamente contra las personas LGBT. El antídoto para este uso está también dentro de este pasaje: estad preparados para dar respuesta a cualquiera que os pregunte sobre vuestra esperanza en Cristo.
¿Cuál es tu respuesta para quienes te preguntan cómo es que tienes esperanza, especialmente durante momentos de sufrimiento y persecución?
En Juan 14:15-21, Jesús promete a los discípulos que Dios enviará el Espíritu Santo, un defensor, que vivirá entre ellos para siempre. ¡Es un consuelo para la comunidad LGBT saber que el Espíritu Santo está incondicionalmente presente para ofrecer consuelo! Este Espíritu de verdad está en el centro de la experiencia de Dios de las personas LGBT. Sin importar lo que la sociedad o la iglesia pueda decir sobre la aceptabilidad de la homosexualidad, el Espíritu da testimonio de la santidad de las vidas LGBT.
Las personas LGBT se sienten con frecuencia como si fueran huérfanas, como si se hubieran quedado sin familia o amigos cuando "salen del armario" para el mundo. Rechazados porque son acusados de no "guardar los mandamientos" (Juan 14:21), este texto vive entre la tensión de ser juzgado y la de ser aceptado como un hijo huérfano. Por el espíritu, Jesús promete venir a sus discípulos, revelarse él mismo, y ayudarles a estar plenamente vivos como hijos de Dios.
¿En qué sentido estamos huérfanas las personas LGBT? ¿Qué consuelo o desafío traen a la comunidad LGBT las palabras de Juan 14:18 ("No os dejaré huérfanos; vendré a vosotros")?
Oración inclusiva
Lee en silencio o en voz alta la canción de Brian Wren, Señor Jesús, si amo y sirvo a mi prójimo. Deja que la lectura te introduzca en un tiempo de oración o meditación.
Señor Jesús, si amo y sirvo a mi prójimo
con mi conocimiento, mi ocio, mi poder o mi riqueza,
abre mis ojos para comprender su enojo
si desde su impotencia odia mi ayuda.
Cuando he asistido con amabilidad la necesidad de mi hermana
y he orado para que se levantara de la desesperación,
abre mis ojos si, clamando ahora por la justicia,
ella lucha por los cambios que yo temo.
Señor, aunque me aferro a la seguridad o a las posesiones,
sin embargo desde la cruz prevalece la pobreza del amor:
abre mi corazón a la vida y a la liberación,
abre mis manos para portar las señales de los clavos.