Epifanía de Jesucristo. Año C.
En la Epifanía, la luz de Dios brilla sobre todos, sobre el mundo entero. Las lecturas para Epifanía invitan a la comunidad de fe LGBT a dejar brillar la diversa y asombrosa luz de Dios, con justicia y gozo.
Isaías 60:1-6; Salmo 72:1-7,10-14; Efesios 3:1-12; Mateo 2:1-12
Conversan Mona West, David Wynn e Irene Monroe.
En la tradición cristiana, el 6 de enero se celebra la Epifanía de Jesucristo. En muchas comunidades hispanas, se conoce como el Día o la Fiesta de Reyes. En estas comunidades, la fiesta se centra hoy en la historia del evangelio de Mateo sobre la visita de los Magos, para honrar a Jesús. La Epifanía celebra la luz, la manifestación o la revelación de Dios al mundo entero -conocida especialmente mediante la sanación de Cristo de las divisiones del nacionalismo, el prejuicio y la intolerancia.
Isaías 60: 1-6 es del profeta con frecuencia identificado como el Deutero-Isaías (segundo Isaías), durante el tiempo en el que el pueblo hebreo fue dispersado en el exilio. Ellos anhelaban el regreso al Monte Sión, su monte santo en Jerusalén. Este es un pasaje de esperanza y restauración, y es casi seguro la fuente, para la visita de los magos en la lectura de Mateo 2: 1-12 de hoy. Las representaciones modernas del acontecimiento y la canción navideña "We Three Kings of Orient Are", también toman los elementos básicos de este pasaje de Isaías.
El pasaje es de luz y visión. La gloria de Dios (el kabhodh hebreo), encontrada en el versículo 1, aparece extensamente en Isaías y por doquier en la Escritura hebrea. Es una palabra central de la autorrevelación divina o epifanía. Dentro de la tradición cristiana, la fiesta de Epifanía y el tiempo litúrgico que sigue expresan este tema fundamental. Se refiere a la luz de Dios revelada al mundo entero, como se describe en Isaías, pero, en nuestra tradición particular, también sugiere al Dios revelado en Jesucristo, nuestra Luz.
La imagen de la luz que resplandece entre las tinieblas aparece también en Isaías 9: 2 y 42: 16. En al visión profética de Isaías, Sión se eleva de nuevo y será una luz para las naciones. Aquellos que están en el exilio regresarán. Incluso los de Arabia serán iluminados por esta nueva luz -traerán grandes riquezas y alabarán a Dios. Efectivamente, el pueblo restaurado brillará con el renovado favor de Dios.
Algunos estudiosos y varios libros han descrito al pueblo LGBT como un pueblo en el exilio. Una comunidad pueblo de Dios en diáspora. Sin embargo, incluso en el exilio, somos llamados a brillar y a ofrecer nuestros dones para el reinado de la justicia y el amor de Dios. Al mismo tiempo, buscamos y trabajamos por crear lugares de aceptación y de relaciones justas que brillen con la gloria de Dios.
¿Por qué las personas LGBT son descritas a veces como pueblo en el exilio? ¿Dónde están los lugares de luz que en nuestro mundo actual están abrazando a las personas LGBT? ¿Qué esperanza ofrecen dichos lugares?
En el Salmo 72: 1-7, 10-14, descubrimos la idea hebrea de gobernante fiel, en una oración para la bendición de Dios sobre dicho gobernante. Probablemente escrito para celebrar la coronación o el cumpleaños de un rey, el salmo enfatiza la imagen profética de un monarca justo y eficaz que recibe el homenaje de muchas naciones. El salmista incorpora el tema de la justicia social de los grandes profetas de Israel. El salmista ruega que el gobernante reciba el don de la justicia (versículo 1), la rectitud (versículo 2), justicia y protección para los pobres (versículos 2, 3, 4), liberación para los necesitados (versículo 4).
En la tradición hebrea, el pasaje apunta al carácter del liderazgo santo, especialmente en la tradición del rey David. Muchos cristianos entienden este santo liderazgo como personificado en Jesús. Ambas tradiciones celebran la preocupación de Dios [por su pueblo] mediante la consagración de un liderazgo que es fiel, justo y compasivo.
Como personas LGBT, ¿de dónde tomamos nuestra idea de un liderazgo fiel? ¿Cuál es nuestra oración por los líderes tanto en nuestra nación como en nuestras comunidades de fe? ¿Cómo asumimos y vivimos los santos y proféticos compromisos presentes en el Salmo 72?
Efesios 3: 1-12 es una carta curiosa para muchos estudiosos. En particular, muchos cuestionan la autoría de esta carta. Algunos señalan a Pablo, al final de su carrera. Otros sugieren que fue escrita más tarde por uno que habría conocido bien el pensamiento y los escritos de Pablo.
La carta es especialmente significativa en la fiesta de Epifanía, el tiempo de la Luz. Como el previo pasaje de Isaías, este pasaje expresa cómo Dios abre y ofrece luz a todas las naciones. El autor sugiere que Pablo fue encarcelado "por amor a vosotros, los de origen pagano" (versículo 1), aquellos que eran distintos de los judíos. El autor habla del "plan secreto" entonces desconocido para los gentiles, pero ahora ellos "comparten la misma herencia, son miembros del mismo cuerpo y participan de la misma promesa que ha hecho Cristo Jesús por medio de su mensaje evangélico" (Efesios 3: 6).
El énfasis de este pasaje está en el radical acto de inclusión realizado en Cristo, alumbrando con una luz similar a la encontrada en Isaías. La luz de Dios alumbra a todos. La iglesia, las personas de fe LGBT, no nos conformaremos con una fe que no brille sobre nosotros, sobre aquellos que sufren, sobre todos los hijos e hijas de Dios.
¿Cómo ves el Cristianismo y otros credos brillando con la justicia y la compasión de Dios? ¿Ves la fe cristiana como una fe que es más abierta o más cerrada? ¿Dónde podría estar Dios llamándote a estar abierto, a brillar?
El autor de Mateo 2: 1-12 recurre a la Escritura hebrea para contar la historia de Jesús. En el pasaje de hoy, vemos evidencias de la imaginería de Isaías y otras escrituras hebreas como Miqueas 5: 2. El autor ofrece esta historia de la visita de los magos a Jesús, para presentar a Jesús en la línea judía del rey David y, a la vez, como alguien que abre la salvación a todos los pueblo y naciones.
"¿Dónde está el niño que ha nacido rey de los judíos?" (versículo 2). La pregunta la realizan astrólogos no judíos, magos de la antigua Persia, al rey Herodes en Jerusalén. Ellos cuentan a Herodes que han visto la estrella, la luz, y quieren rendir homenaje al rey recién nacido. Herodes se muestra interesado, quizá preocupado por que el reino de sus propios hijos esté amenazado. Envía a los magos a Belén a buscar al niño, esperando que regresen con noticias. Sólo después descubrimos que el interés de Herodes es destruir al niño (versículos 16-18). Los magos, sin embargo, regresan "por otro camino" (verso 12).
Inundados de alegría, los magos encuentran a María y a Jesús donde "la estrella se había parado" (versículo 10). Se arrodillaron y ofrecieron los mejores dones. Extranjeros venidos de muy lejos son alumbrados por la luz de Cristo. Jesús no era sólo para Belén, no sólo para Jerusalén, sino para el mundo. El niño de la paz, Jesús, nació en medio de la hostilidad y la violencia política y religiosa.
La hostilidad y la violencia continúan en nuestro mundo. Muchas personas LGBT conocen de primera mano las amenazas, la injusticia y la crueldad. Sin embargo, a pesar del peligro, muchas personas LGBT han tomado el sendero de la luz de la fe. Ellos brillan con sus dones.
¿Qué miedos y consuelos provoca la historia de los magos en las personas LGBT y en las comunidades que los apoyan? ¿Por qué los alejados serían alumbrados por la luz de Cristo? ¿De qué maneras has sido desafiado o confortado por las lecturas de la Escritura para la Epifanía?
ORACIÓN INCLUSIVA
Dios, toda Luz y toda Verdad,
te buscamos.
Muéstranos el camino en este mundo y en este tiempo.
Brilla sobre nosotros. Brilla sobre toda tu creación.
Brilla con tu paz, tu justicia y tu compasión.
En el nombre de Jesús, Luz y Verdad. Amén.
"¡Levántate, resplandece, porque ha venido tu luz
y la gloria de Dios ha nacido sobre ti!" (Isaías: 60: 1).
Versión original en inglés: Out in Scripture
